HISTORIAS, ANECDOTAS y TESTIMONIOS
De Lorenzo Pepe, político, secretario general del Instituto Juan Domingo Perón:
La tumba donde se hallaba Perón en la Chacarita ni siquiera era de él, sino de Tomás Perón, su padre. Se estaba deteriorando el ataúd y el propio cuerpo de Perón después que profanaron su tumba y cortaron sus manos. Se lo llevó al Mausoleo de San Vicente, un lugar digno, respetable, pero no es majestuoso ni faraónico.
El Mausoleo está preparado para que en el futuro también descansen allí los restos de Evita, pero, por el momento, la familia Duarte no accedió a ello.
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De Isabel Sarli ( Hilda Isabel Gorrindo ), actriz y sex symbol de la pantalla grande:
Nací el 9 de julio de 1936, tenía 16 años al momento de fallecer Evita.
Cuando fui elegida Miss Argentina, en 1955, conocí a Perón. El encargado de Prensa y Difusión me llevó a conocer al Presidente, antes de que yo viajara a Estados Unidos a concursar por Miss Universo. Perón me dijo : " Ud. vale más que veinte embajadores, porque es embajadora de buena voluntad y de la belleza de la mujer argentina ". A Evita no la conocí, pero sabía mucho de ella a través de mi modisto Jamandreu, de su amor por los humildes y de su entereza hasta el final a pesar de llevar una penosa y cruel enfermedad. Guardo junto a mí una foto de Evita bailando el pericón con Armando Bó, él fue su pareja en la película La cabalgata del circo.
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De Ricardo Laurence, investigador, escritor, autor del estudio histórico " Tripulantes del Graf Spee en tres atrapantes historias ", Ediciones del autor, 250 páginas, Rosario, 2000:
Es indiscutible que Eva Perón tuvo un notable desempeño en todo aquello referido a la ayuda social, y es precisamente por este aspecto que permanecerá en la memoria popular.
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De Julio Blanck, editor jefe de diario CLARIN, Buenos Aires, Argentina:
El peronismo celebró el 61 ° aniversario de su episodio fundamental, el 17 de octubre de 1945. Lo hizo con una manifestación fúnebre: el traslado de los restos de su líder desde el cementerio de la Chacarita hasta el mausoleo construído en San Vicente. Semejante manera de festejar puede resultar curiosa, sintomática o reveladora, según desde el punto de vista que se mire. Pero no provoca indiferencia, como nunca la provocó el peronismo a lo largo de su existencia. El cadáver de Perón como en su momento el de Evita, bajo circunstancias muy diferentes, han sido actores de la política argentina con una potencia que sólo puede explicarse por lo que representaron Juan Domingo Perón y Evita en vida. Desde siempre han sido bocados apetecibles en el juego del poder. Lo que se pone en juego es quién de los diversos actores del peronismo consigue para sí la capacidad de definir, así sea circunstancialmente, qué es ser peronista.
La categoría es tan amplia para que en ella hayan convivido la derecha conservadora y la izquierda revolucionaria, las convicciones democráticas y el autoritarismo brutal, el sindicalismo ortodoxo y el clasista, el tercermundismo y las relaciones carnales. Podría decirse que ser peronista es propiciar que los trabajadores reciban el 50 % de la riqueza que genera el país; un logro del primer peronismo que desde entonces nunca nadie igualó.
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De Julie Taylor, antropóloga, escritora, autora del durísimo
y ofensivo libro antiperonista " Eva Perón - Los mitos de una mujer ", Ediciones Belgrano, 260 páginas, 1981, Buenos Aires:
Nacida en un mal encubierto prostíbulo de su madre, viajó a Buenos Aires para establecerse como prostituta. Poseía una atracción oscura y tosca, era una mujer frígida que demostraba hábitos sexuales que contribuyeron espectacularmente a su notoriedad. Basaba su control mediante prácticas sexuales secretas, torturaba a sus opositores con shocks eléctricos que los dejaba impotentes, hizo encarcelar a mujeres y adolescentes, ella misma asumía la responsabilidad de la policía secreta del régimen. En la cresta de su sanguinaria carrera enfermó y el populacho le ofreció ritos paganos ...
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De Ezequiel Martínez Estrada, escritor, autor del hiriente libro antiperonista " ¿ Qué es esto ? - Catilinaria ", Editorial Lautaro, 313 páginas, 1956, Buenos Aires:
Todo lo que le faltaba a Perón lo consumó ella o se lo hizo consumar a él. El era la mujer y ella era el hombre. Algunos críticos estupefactos sólo atinan a decir que esa ha sido cuestión del diablo. Los dos eran aspectos alotrópicos de Satanás. Era ella la sublimación de lo torpe, ruin, ofídico, y el pueblo vio que encarnaba atributos de dioses infernales ...
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De Ricardo Boizard, escritor antiperonista, como Mary Main, Silvano Santander, Julie Taylor y Ezequiel Martínez Estrada, ha presentado a Eva Perón como un monstruo infernal sediento de poder, sangre y venganza, autor del libro " Esa noche de Perón ", Editorial De - Du S.R.L., 222 páginas, 1955, Buenos Aires: Para colmo de la desdicha, Eva, antes de llegar a la muerte, pasa a la antesala de la putrefacción. Perón cada vez que debe acercarse al lecho de Eva, lo hace con mascarilla. A veces desde la puerta misma, los ministros debían oír los aullidos, en otras ocasiones tenían que estar soportando el terrible hedor que despedía el cuerpo canceroso ...
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De Josephine Baker, cantante, bailarina y actriz de cine, llamada " La Venus de Ebano ", heroína de la Segunda Guerra Mundial, defensora de los derechos humanos contra la discriminación racial, condecorada por el gobierno de Francia con la Cruz de Lorena de Oro y la Legión de Honor:
Puede ser que haya quienes digan que resulta fácil hacer el bien cuando se tiene la posibilidad material de llevarlo a cabo, pero es menester recordar que hay muchos que prometen en demasía, y que, una vez llegados al poder, por una u otra razón, olvidan sus promesas. Quiso que su país fuera grande entre todos, para que su pueblo estuviera orgulloso de ser argentino, trabajó desde la mañana hasta la noche, sabía que era preciso actuar rápidamente y no perder el tiempo.
No la conocí nunca, pero yo la siento en todas partes, invisible para otras personas, pero no para mí, porque no está usted muerta, querida señora Eva Perón, sólo se fue a reposar.
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De Jorge Furnot, locutor, por la cadena oficial de radiodifusión, el día 26 de julio de 1952, a las 20.36 horas:
" Cumple la Secretaría de Informaciones de la Presidencia de la Nación, el penosísimo deber de informar al pueblo de la República, que a las 20.25 horas ha fallecido la señora Eva Perón, jefa espiritual de la Nación. Los restos de la señora Eva Perón serán conducidos mañana al Ministerio de Trabajo y Previsión, donde se instalará la capilla ardiente ".
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Del Dr. Horacio González, sociólogo, profesor, director de la Biblioteca Nacional:
En el Panteón Nacional de París era posible ver, en el video del discurso de André Malraux - soplan vientos, algunas hojas se vuelan, pero el ministro sigue hablando - , el momento del traslado de los restos del partisano Jean Moulin, jefe de la resistencia contra los nazis, para reposar en el mismo lugar donde están los restos de Voltaire y Rousseau. Aunque las tradiciones culturales más relevantes piensan que la memoria precisa más de escritos, palabras o biografías que de la gloria del osario, el pensamiento político clásico siempre tuvo una predilección por la devoción de muertos célebres en urnas especiales o cenotafios reverenciales para la oración laica. Así, el primer peronismo pensó el embalsamamiento de Evita como la parte espiritualizada del Estado, y como exorcizo frente a las fuertes sacudidas de la historia. El peronismo del exilio tuvo en ese mismo cadáver secreto y errabundo un testimonio de su propia situación de destierro. La devolución de esa célebre reliquia de las luchas sociales argentinas parecía augurar en cambio otro momento en que se sellaba el fin de la confrontación. Es que la profanación de los muertos presentaba el equivalente de la punición a los vivos. A Perón, como buen nieto de un médico positivista, la muerte le provocaba un escéptico respeto, una irónica inquietud, como se puede leer en el buen libro del Dr. Taiana. Concibió la perdurabilidad del movimiento que llevaba su nombre en términos de un legado incorpóreo, sin ADN posible, en un éxtasis que lo fusionaba con el pueblo parlante y rítmico, " La más maravillosa música, la palabra del pueblo argentino ". Frente al ideal de que los muertos entierren a los muertos, según rezan los procesos políticos menos rituales, los que recrean ritos frente a un ataúd insigne siguen preguntándose cómo los nombres congregantes surgen del vestigio y la ceniza. Ante el primer ataúd de Perón - no el que se ha confeccionado para el Mausoleo - Balbín hizo su recordable discurso, sutil y atrevido, donde equiparaba a Perón con Yrigoyen, y por su intermedio los reconciliaba. El discurso fúnebre, la oratoria frente a los vestigios exánimes de un patriarca, es un género esencial, tan condenado por Platón como exaltado por Malraux. Como siempre se habla en nombre de cenizas, veremos cómo se reflexiona en torno a las incógnitas del presente y qué papeles hacen volar los vientos de San Vicente.
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De Mario Pacho O´Donnell, psicoanalista, político, historiador y escritor: No hay dudas de que Juan Domingo Perón merecía para sus restos un lugar más privilegiado que la bóveda familiar en el cementerio de la Chacarita porque, guste o no guste, tiene el rango de prócer. Es esto lo que pone en duda lo acertado del sitio elegido ya que nuestros próceres en su inmensa mayoría están enterrados en el histórico cementerio de la Recoleta. Alguien podría objetar que es un lugar demasiado oligarca para el jefe de la revolución peronista, pero eso es desconocer que desde hace años nuestros compatriotas de buena posición económica han desplazado sus duelos a los enterratorios privados que están a la vera del Acceso Norte, lo que se hace evidente en el deterioro que se abate sobre los mausoleos y bóvedas del camposanto fundado por Rivadavia a la vera del antiguo convento franciscano del Pilar que, a pesar de ello, despiertan la curiosidad de los turistas que desembarcan en Buenos Aires. En mi entender Perón, una figura fundamental de nuestra historia, merecía compartir su inmortalidad con Dorrego, con los Alvear, con Pellegrini, con Nicolás Avellaneda, con el almirante Brown, con Juan Bautista Alberdi, con Roque Sáenz Peña, con Juan Manuel de Rosas, con Hipólito Yrigoyen y muchos más. De todas maneras es comprensible que la provincia de Buenos Aires haya reclamado que los restos de Perón descansen en el territorio que lo vio nacer, y es altamente elogiable que para ello se haya construído un mausoleo en el que, en el futuro, también encontrará su sosiego definitivo la señora Eva Duarte de Perón, hoy absurdamente separados por kilómetros de distancia.
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De Julio Sierra, licenciado en Filosofía, periodista, traductor, escritor, autor del libro Primeras Damas Argentinas, Editorial El Ateneo, 276 páginas, ilustrado, 2002, Buenos Aires: Todo lo que ella hizo fue motivo de polémica. Y también lo que no hizo y se le atribuyó. Sobre Eva Perón se ha escrito, se ha dicho y filmado más que sobre cualquier otra primera dama argentina. Como mujer política fue única. Hasta su advenimiento las consortes presidenciales ocuparon lugares poco destacados y siempre protocolares. Después de ella ninguna otra mujer logró ocupar un espacio comparable. " Unica ". Tal vez no sea excesivo afirmar que, acerca de ella, sólo esto puede decirse sin que se desate la polémica. Los descamisados la idolatraron. Los oligarcas la odiaron. La gran masa del pueblo la " santificó ", pero no de un modo religioso o superticioso, la gente la glorificó de la misma manera que se exalta en el hogar el recuerdo de la madre muerta, y toda madre es, en la mitología popular argentina, una " santa ". A más de medio siglo de su desaparición, Eva Perón sigue siendo un misterio de múltiples aristas. Mito, hada buena o bruja malvada. Sea cual fuere la perspectiva desde donde se la analice, no parece haber duda alguna: fue única. Eva Perón fue la primera dama más joven de la historia argentina. Tenía 26 años cuando Perón asumió el poder por primera vez. Sólo ella, de todas las consortes presidenciales, aparece en el retrato oficial junto a su marido en el Museo de la Casa Rosada. Fue la única mujer de la política argentina que ocupó un espacio propio junto a su marido, no sólo en su función de primera dama, sino también dentro del partido peronista y, sobre todo, entre los dirigentes de la poderosa CGT, ámbito masculino y machista por excelencia. Su fuerza de voluntad y su obstinación la llevaron a fundar el Partido Peronista Femenino, y más tarde la Fundación Eva Perón. Estas tres organizaciones serían la base sobre la que ejercería el poder. Ella fue también la primera y única mujer de primer mandatario que ocupó oficialmente el Palacio Unzué, residencia oficial del presidente de la Nación y su familia, demolido después de la caída de Perón por orden de las autoridades de la llamada Revolución Libertadora. Un acto más de la ceguera cultural tantas veces repetido en la Argentina. Aunque nunca ocupó cargo alguno, fue la única esposa de primer mandatario que viajó por Europa en representación de su marido y del país. Es la única mujer argentina que ha sido convertida en personaje de comedia musical. También fue la única argentina que recibió el Collar en grado extraordinario de la Orden del Libertador General San Martín. El gobierno de facto que asumió el poder después de septiembre de 1955 ordenó el embargo y remate de los bienes del presidente derrocado y su esposa. Al igual que la residencia presidencial, el collar desapareció. Como era de esperar, nada de eso sirvió para desperonizar al país. Resulta difícil imaginar que con esos actos casi pueriles se pensara lograr resultado alguno. Uno se queda más bien con la impresión de un revanchismo recalcitrante, sentimiento recurrente en la historia argentina. Como primera dama de la Argentina entre 1946 y 1952, Evita se convirtió en la heroína del régimen, hasta ser declarada Jefa Espiritual de la Nación. Si bien el presidente era su marido, ella adquirió un enorme poder por presencia propia. Por su labor de acción social, los humildes y los pobres la amaron hasta el fanatismo. Su opositores vieron en ella a una oportunista que usó a Perón para adquirir poder y fortuna. Sea cual fuere la visión que cada uno tenga de ella, santa o déspota, sigue siendo una de las figuras más discutidas del siglo XX. Su única ambición, según ella misma lo confesó en su autobiografía, fue la de querer que " el nombre de Evita figurase alguna vez en la historia de mi Patria ". No hay duda alguna, su ambición ha sido plenamente satisfecha.
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De Julio Portela, Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón, Museo Evita, Buenos Aires: El Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón funciona en Lafinur 2988, Museo Evita. Se propuso recrear el acontecimiento que representó Eva Perón, aun fuera de nuestras fronteras, como personaje sobresaliente del siglo XX. La idea surgió en especial para satisfacer la demanda, sobre todo de extranjeros que visitan nuestro país, quienes conociendo esa trayectoria, manifestaron su deseo de asistir a un museo temático, si existiera.
El edificio destinado para tal fin, fue asignado por ley. El mismo fue construído por el arquitecto Estanislao Pirovano en 1929, a solicitud de una familia de Buenos Aires. En 1948 fue adquirido por Eva Perón que lo destinó a la Fundación y funcionó como Hogar de Tránsito.
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De Guido Braslavsky, periodista: Roberto Vassie, ex conscripto de la clase 53 que hizo su servicio militar en la Compañía de Ingenieros 10, fue el soldado que lloró desconsoladamente ante el paso del cortejo fúnebre de Perón, el 2 de julio de 1974. El hecho fue registrado por el fotógrafo Ki Chul Bae, y la foto fue publicada por la revista GENTE, una imagen que dio la vuelta al mundo y simbolizó el dolor popular por la muerte del viejo líder. Vassie asistió en ubicación privilegiada al último viaje de los restos de Perón desde el cementerio de la Chacarita al mausoleo de San Vicente, el 17 de octubre de 2006.
El mausoleo ya tiene el cuerpo del General y espera guardar el de la Abanderada de los Humildes, Evita Perón.
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De Ricardo Péculo, tanatólogo, director del Instituto Argentino de Tanatología, graduado en Dirección y Administración de Empresas, concejal: En todos los países se honra a las grandes personalidades, como Evita y Perón, más allá de las ideologías. Mi responsabilidad, y la de mi hermano Alfredo, era que Perón llegara al Mausoleo de San Vicente y llegó. Ha sido un honor, lo hice gratis. Fue una experiencia inolvidable por la pasión que mostró la gente. Si se hubiera caído el cajón ... bueno, hubieran existido los restos de Perón pero no el cuerpo entero. La verdad es que se desarmaba porque el cuerpo, al estar en un panteón, se disecó y no había ningún tratamiento de conservación hecho.
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De Ema Cibotti, investigadora, profesora de Historia, máster en Ciencias Sociales, escritora, autora del libro " Sin espejismos, versiones, rumores y controversias de la historia argentina ", de Editorial Aguilar, 255 páginas, Buenos Aires, Argentina, 2004:
De Juana Manso nadie se acuerda, de Manuela Gorriti tampoco. La única que queda de alguna manera asociada a Mayo y al Himno es Mariquita Sánchez de Thompson, pero fuera de ella parece que no hubiera habido otra mujer hasta Evita. Evita hizo lo que todo dirigente social y político desea hacer: acercarse al pueblo y establecer un contacto perdurable. Logró hacerlo gracias a su vocación personal, pero también porque disponía del aparato del Estado y la respaldaban tanto la amplia burocracia como los medios de comunicación. Es posible afirmar que su idea de ayuda social, tamizada por una concepción política personalista, alcanzó, sin embargo, una dimensión democrática que no se hallaba en la prédica de las más nobles damas de la Beneficencia. Y, con la mirada puesta en el presente, frente a la creciente exclusión social, su reclamo de justicia sigue resonando con una dramática actualidad ...
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De Jorge Luis Borges, profesor, poeta, ensayista y escritor, destacada figura de la literatura latinoamericana y universal : " Ni Perón era Perón ni Eva era Eva. Eran individuos misteriosos, anónimos, de los que no conocíamos ni los rostros ni los nombres secretos ".
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De Manuel Penella da Silva, periodista español antinazi, redactor de " La razón de mi vida ":
Por sugerencia del embajador argentino Benito Llambí, viajé desde Zurich a Buenos Aires para redactar la biografía de la Abanderada de los Humildes. Evita aceptó. Mis palabras la impresionaron mucho. Escribiría sus propias ideas en primera persona. Tiempo después, cuando le leí el manuscrito, Evita expresó emocionada: " Sí, sí, es así como pasó todo ". El libro es su retrato, lenguaje simple, directo, sencillo,
apasionado, necesariamente violento. Raúl Mendé, ministro de Asuntos Técnicos, realizó correcciones, por orden de Perón. Evita, deteriorada por la enfermedad, deseaba ver el libro publicado lo antes posible. Un mes después de la publicación, octubre de 1951, y antes de regresar a Europa, la visité para despedirme. " Gracias por el libro, es el hijo que no tuve ", fueron sus palabras.
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De Atilio Renzi, secretario privado de Evita, uno de sus más fieles colaboradores: En 1951, Evita llamó en secreto a los sindicalistas y al general Humberto Sosa Molina para ordenarles la compra de 5.000 pistolas automáticas y 1.500 ametralladoras que se entregarían al pueblo en caso de golpe militar. Las armas fueron vendidas por el príncipe Bernardo de Holanda. A la muerte de Evita, Perón las donó a la Gendarmería. En 1955, esa institución utilizó esas armas contra él.
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De Dora Dana, Ciudadana Ilustre de Junín, esposa del periodista y dirigente radical Moisés Lebensohn: En uno de los encuentros poéticos que se realizaban en la Peña Eva Perón, los días miércoles en el Hogar de la Empleada Libertador General San Martín, Avenida de Mayo 869, que reunían escritores y literatos, se dió el hecho del discurso del profesor Chichilnisky y las risas de Chocha Nicolini y Evita. El Dr. Salomón Chichilnisky, médico, escritor, miembro de la OIA ( Organización Israelita Argentina ), pronunció un discurso. Chichilnisky transformaba cada diptongo ue en oi. Y bueno ... Evita y Chocha Nicolini no pudieron contener las carcajadas. Entonces, rápida como un rayo, Evita amonestó a la hija de Nicolini: " Se vá al baño y se queda allí hasta que el doctor termine su discurso ". Evita no era antisemita, para nada xenófoba, las risitas se debieron a una cuestión auditiva, por la pronunciación del Dr. Chichilnisky.
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De Julio Ellena de la Sota, escritor y poeta: En cuanto al episodio Chichilnisky discrepo. Evita Perón tenía demasiada conciencia de sus deberes como para liberar una sonrisa inoportuna. Yo estaba sentado en el cuarto lugar del lado de la mesa en que se hallaba ella. De pronto se escuchó su orden, inapelable. Emma Chocha Nicolini iría al servicio, en penitencia. Pero Evita no hubiera reído nunca. No debía reir, era dueña de su perfil.
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De José Ignacio Rucci, dirigente sindical: Ella fue paladín de todas las conquistas que alcanzaron los humildes. Gracias a su acción sin descanso, gracias a esa entrega que hizo de su vida, miles de niños aprendieron a sonreir, hubo remedio para el dolor de los ancianos, y los pobres supieron la dicha de un hogar digno y de un trabajo bien remunerado. Por eso, en la perspectiva que nos da el tiempo, Eva Perón, cuanto significó, se agiganta cada día que pasa. La calumnian, la injurian y la ofenden los personeros de la antipatria, no le perdonan que siga latiendo en el corazón de cada argentino, le reprochan que su memoria haya vencido a la propia muerte. Bien se dijo que la revolución justicialista al darnos a Evita nos brindó a la abanderada de las causas justas. Evita hizo posible el acerto de que en nuestra patria " los únicos privilegiados son los niños ", puso la frase en su corazón y la convirtió en obras. Hablar de Evita, nos obliga a sentirnos prisioneros de la emoción, es evocar una a una todas esas magníficas realidades que fue sembrando en su trayectoria como vanguardia de lo nacional y popular. Fue inspiradora de la inclusión del derecho del trabajador en la Constitución Argentina. Así pasó días y horas, sin aceptar descanso para su cuerpo fatigado, junto a sus obreros en Trabajo y Previsión. Nos enseñó que debíamos estar firmemente unidos, sin fisuras, dispuestos a no transigir ni desmayar ante los atropellos y los voraces intereses de los que tratan de sojuzgar al pueblo. Su acción en materia sindical fue la gran cátedra donde aprendimos a luchar orgánicamente transformando un movimiento atomizado en una verdad coherente que es la CGT. Sobre todo, aprendimos a su lado, que el trabajador tiene el alienable derecho de reclamar se lo trate como un ser humano y no como un ente sin vida y sin sentimientos, un material maleable al que se explota y se esclaviza. Evita trabajó para canalizar con firmeza y decisión a las fuerzas populares. Gracias a todo eso que hizo, los trabajadores pudimos celebrar con alegría nuestro 1º de Mayo, que hasta su advenimiento, hasta la llegada del peronismo, era jornada de protesta y dolor. Consideró con su condición de visionaria que la acción sindical no se debía limitar exclusivamente a la lucha para alcanzar mejores salarios, sino que tenía que proyectarse a otras instancias que elevaran los niveles de vida de los trabajadores. Marcó los rumbos de una acción social efectiva y concreta. Sanatorios y policlínicos se extendieron por todos los rincones del país, las escuelas fueron surgiendo en toda nuestra tierra. Los obreros, merced a su bregar, pudieron incorporarse a la Universidad, hasta entonces vedada para ellos, pues era patrimonio de un minúsculo grupo privilegiado. Su espíritu convocó a la hermandad entre los argentinos, y sus realidades tuvieron como fundamento un sólo anhelo: amar a la Patria y luego enaltecerla. El odio de los que jamás le perdonaron su entrega a la causa del pueblo, la hizo víctima de la mayor afrenta al profanar su cadáver, pero no pudieron borrarla de la mente ni del corazón del pueblo. Fijó un sendero y marcó una verdad, su grandeza venció al odio y a la muerte.
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De Blanca y Erminda Duarte, hermanas de Evita:
Nuestra hermana no ha escrito Mi Mensaje. El texto de Mi Mensaje es apócrifo.
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De Alberto Schprejer, editor: Edité el libro, en 1994, porque nadie conocía su existencia y porque ante la inactividad de la familia de Eva Perón, lo consideré de dominio público. Fui enjuiciado por daños y perjuicios. El texto de Mi Mensaje fue dictado por Eva Perón probablemente a fines de 1951 hasta antes de su muerte. Fue Juan Jiménez Domínguez, dirigente sindical de los docentes, quien tomó gran parte de las notas y las mecanografió. El fallo judicial que establece la autoría de Evita, pasa los derechos de publicación a sus herederos, que no parecen interesados en darlo a conocer. Los argentinos no podrán leer el último mensaje de Eva Perón hasta que decidan publicarlo sus herederos, que siempre negaron su autenticidad.
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Del Dr. Alejandro César Verdaguer, juez a cargo del Juzgado Nacional en lo Civil 101: El fallo judicial que lleva mi firma dice: " Las iniciales contenidas en el texto serán atribuídas a María Eva Duarte de Perón por cuanto así lo determinó el perito, y existen otros elementos de prueba que apuntan a esa misma dirección. En consecuencia, tendré a María Eva Duarte de Perón por autora de la obra Mi Mensaje."
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Del Dr. César Calcagno, abogado: Jorge Benedetti, militante peronista, compró por 7.600 pesos el original de Mi Mensaje que salió a remate en 1987, no quería desprenderse de esas 79 páginas ni para entregarlas al Juzgado para que hiciera la pericia caligráfica, pidió que se hiciera delante suyo. Así se hizo. Las pericias demostraron primero que el papel de los originales eran de la época. Y luego se comprobó que las firmas de Eva Perón y las dos iniciales E y P de los originales de Mi Mensaje tienen similar morfología gráfica con analogía en los elementos gráficos estructurales. Fueron decisivos en el juicio los testimonios del Dr. Antonio Cafiero y del historiador Fermín Chávez.
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De Liliana Moreno, periodista: En 1994 el editor Alberto Schprejer realizó una edición de 5.000 ejemplares de Mi Mensaje, una obra que familiares de Eva Perón consideran apócrifa. El padre Hernán Benítez, confesor de Eva Perón, lo denunció como una falsificación cuyo objetivo era empañar la religiosidad de Evita. El 17 de octubre de 1952, a tres meses de la muerte de Eva Perón, José Espejo, secretario general de la CGT, leyó en la Playa de Mayo " Mi voluntad suprema ", el capítulo 29 de Mi Mensaje. En 1955, el escribano Jorge Garrido realizó un inventario de las pertenencias de Perón, se encontró con el texto y lo ocultó en su casa convencido que la Revolución Libertadora lo destruiría. A su muerte, los hijos de Garrido, deciden venderlo. La firma de remates Posadas S.A. anunció el 20 de setiembre de 1987 el remate del libro Mi Mensaje , que fue adquirido por Jorge Benedetti.
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Del Diario LA RAZON, Buenos Aires, fundado el 1º de marzo de 1905 por el periodista Emilio Morales, en su edición del dia 27 de junio de 1947: Ni una sola palabra se ha dado a conocer oficialmente de la conversación que sostuvieron el Sumo Pontífice y la señora Eva Perón, pero un miembro de la casa papal indicó que Pío XII le hizo presente a la señora de Perón su agradecimiento personal por la ayuda que la Argentina ha prestado a las naciones europeas azotadas por la guerra, y por la colaboración en la obra de socorro de la Comisión Pontificia.
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De Bernarda Meneses, propietaria de la casa de modas Bernarda, uno de los nombres más importantes de alta costura en Argentina: Evita venía siempre acompañada de bastante gente, artistas y funcionarios públicos. Nuestra primera oficiala del taller, Olimpia Ogando, confeccionó el hermoso vestido que usó para la visita al Papa Pío XII, Eugenio Pacelli, realizado en jersey negro Tanagra, original de la diseñadora francesa Madame Grés. Con un pequeño broche en el ruedo de la cola se podía prender y dar el delicado efecto de manto. Evita le propuso a mamá que la acompañara en su viaje a Europa, y en su equipaje llevó muchas de nuestras creaciones.
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Del Dr. Héctor José Cámpora, odontólogo y político: El 16 de junio de 1955 se inicia la etapa más despiadada de la historia de la República Argentina. La metralla cae sobre el pueblo. Tres meses más tarde, se instaura la dictadura.
Comienza la sistemática destrucción de una comunidad organizada. Se desmantela la industria, se corrompe el salario. La educación, la vivienda y la salud se tornan privilegios inalcanzables. En nombre de la libertad son encarcelados miles de argentinos. Se disuelven el Partido Justicialista y la Fundación Eva Perón y se saquean sus bienes, que son del pueblo. En nombre de la razón se prohíbe la palabra con un decreto sin precedentes en el mundo moderno. Decir Perón es un delito. Decir Evita merece castigo. Podrá la dictadura llenar las cárceles, podrá gasear y apalear, torturar y fusilar, pero no conseguirá doblegar la decisión de un pueblo. El pueblo sigue diciendo Perón. El pueblo sigue diciendo Evita.
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Del Dr. Carlos Elizagaray, abogado: El día que bombardearon la Casa de Gobierno, 16 de junio de 1955, estaba presente para defenderla, yo era teniente primero del Ejército. En el interior de la Casa Rosada éramos, entre civiles y militares, unas 400 personas.
Cada bomba que caía levantaba polvareda, las paredes de la Casa Rosada están construídas de adobe. La Plaza de Mayo presentaba un cuadro terrible, cada 15 o 20 metros había un automóvil incendiado. Omnibus con niños muertos y cabezas desparramadas en el techo.
Recordar esto me trae mucha congoja. Lo sucedido había sido tan horrible ..., se calcula que hubo cientos de muertos y miles de heridos, ese jueves era día laborable, los autobuses repletos de escolares y pasajeros. Luego se pretendió endilgar a Perón la quema de la iglesias. ¿ Porqué quemaron las iglesias del centro, y alrededor de Buenos Aires no hubo incidentes contra las iglesias, no se profanó ningún templo, no se molestó a ningún cura ?. Yo estaba convencido que, cuando la situación estuviera controlada, el gobierno iba a reaccionar ante tamaño crimen, que se iba a enjuiciar y a fusilar a los responsables de los bombardeos. Cuando empezaron los discursos conciliadores de Perón, me dí cuenta de que su suerte estaba echada, porque no reaccionaba ante ese genocidio. Perón no quiso derramar sangre argentina, no quiso una guerra civil , no quiso armar a los sindicatos. Si Evita hubiese estado en ese momento, realmente no sé que hubiera pasado. En 1955 había un odio espantoso a Perón. El resentimiento de la clase media alta y de la alta era tremendo. Difícil de concebir que seres humanos tuviesen tanto rencor y odio para aceptar lo que el peronismo proponía, la justicia social, los buenos salarios y un régimen laboral digno. En 1955 se vivía un momento muy serio, grave. Los gastos que generaba la justicia social, excedían a los ingresos, y disminuyeron las reservas del Banco Central. Creo que la caída de Perón se debió a la claudicación del sistema económico, estoy absolutamente seguro. Perón lo reconoció en España, durante su exilio. Por eso, sus reiterados reclamos públicos de que se trabajara más, de que se produjera más. Hoy, para volver a realizar un justicialismo distributivo hay que crear condiciones económicas elementales que, en Argentina, no están dadas.
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De Juanita Palmou, encargada de la distinguida maison de modas Paula Naletoff: Eva Perón era una mujer bonita, joven y de espléndida piel. Tenía una gran personalidad. Escuchaba nuestras sugerencias, pero ella decidía. En Europa, en Madrid, se presentó en un homenaje con un vestido de lamé dorado y capa de visón. Ante nuestras opiniones y comentarios, nos había respondido: " No importa, yo lo puedo llevar ".
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De Gladys Georgette, directora de Henriette, afamada casa de modas de la ciudad de Buenos Aires: Asunta, María Asunción Fernández, jefa del taller, iba a la residencia presidencial a las 7 de la mañana y le preguntaba a Evita qué actividades tenía, entonces le preparaba los conjuntos de ropa y le sugería lo que era más apropiado para cada ocasión. Evita prácticamente no dormía, se acostaba a las 4 de la mañana.
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Textos cortesía de Carlos Vitola Palermo de Rosario, Santa Fe, República Argentina.
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